viernes, 30 de septiembre de 2016

QUIERO UN TODO...

No quiero un día sí y otro no. Quiero un todo, quiero jugármela por ti y que te la juegues por mí, quiero dar todo y recibir lo mismo también.

No quiero pláticas a medias, quiero conocer todo de ti, tus secretos, tus pasiones, tus miedos y tus sueños; quiero que me cuentes tu futuro, tus planes, lo que quieres lograr. Platícame qué es lo que te apasiona y cuál es tu marca de autos favorita. Cuéntame tu día, con detalles, hasta lo que no te gustó de él…

Déjame hablarte de mis gustos, de la pasión que tengo por escribir y mejor aún, quiero que si no compartes esa pasión al menos me leas; que te guste, que te inspire, que algo de mí te motive.

Déjame te cuento mis miedos, y tal vez juntos podamos superarlos; no te rías, a veces puedo actuar como una niña pequeña y llorar sin motivo, pero por ti, prometo ser fuerte.

No quiero que me dejes hablando sola, prefiero que me digas que estás ocupado, saber que tienes otras cosas que hacer, saber que tienes una vida y que esa vida puede ser compartida conmigo; quiero que los dos tengamos que contarnos algo al final del día y que no todo se resuma a un: “Estoy bien, gracias”. No, no estás bien, cuéntame, que te hizo reír, o enojar, o gritar.

por Débora Carrasco

No hay comentarios:

Publicar un comentario